Está situado en un paraje natural inmejorable, desde donde se puede avistar al Norte, un pequeño Torreón situado en la finca Monte Sordo (Portaje), al Sur, el castillo almohade de la Marmionda de Portezuelo, al Este, la localidad de Torrejoncillo y al Oeste, el embalse de Portaje.
Está localizado a 377 metros de altura y en unas coordenadas geográficas de 39º 54´3.76´´ Latitud Norte y 6º29´45´33´´ Latitud Oeste, dentro de lo que denominamos Dehesa Boyal de Torrejoncillo, terrenos que aún en la actualidad, pertenecen al Ayuntamiento de Torrejoncillo, aunque la explotación de la misma no depende de él, sino de una asociación ganadera local.
El estado de conservación es deplorable, ya que apenas se mantiene en pie una de las paredes, que formarían dicha construcción, el resto, suponemos que se ha ido derrumbando con el paso del tiempo, o simplemente, una vez acabaron las guerras en la zona, y, por tanto, también la utilidad de este tipo de construcciones. La gente de la época fue utilizando las piedras de las paredes para construir sus propias casas o chozas. La cronología de dicho Torreón es todo un enigma, ya que no encontramos nada del mismo, recogido en ningún libro, con lo que datarlo es casi una incógnita. Suponemos, por el tipo de construcción, que se debió construir en época medieval-romana, por el tipo de material (granito) que se utilizó para la cimentación de la base del mismo.
Los materiales que se han utilizado para la construcción del mismo, se reduce a trozos de pizarras, argamasa y, bloques graníticos para sustentar las bases del mismo. Podemos afirmar, que la pizarra era extraída de alguna de las numerosas pedreras localizadas en los alrededores de la zona del Torreón; y los bloques graníticos suponemos serían transportados de localidades cercanas, ya que por la zona no era habitual este tipo de material.
Es una construcción de al menos de dos plantas, con una altura aproximada de 4 metros. A día de hoy, solo se mantiene en pie una de las paredes que formarían parte del Torreón y en la que se puede observar claramente la altura de lo que sería la primera planta, así como los cuatro palos o anclajes para colocar las vigas del segundo piso.
El Torreón, es una pequeña edificación de base cuadrada, con las esquinas reforzadas de granito, y las paredes de pizarras, con un grosor de 1,20 metros.
En el medio del Torreón podemos observar un pequeño aljibe o depósito, con unas medidas interiores aproximadas, de 1,50 x 1,50 metros y unas medidas exteriores de 2,15 x 2,10 metros, cuya utilidad no sería otra que depositar agua.
Está construido en un sitio estratégico, ya que su principal función o utilidad era avisar a Coria, (ciudad medieval situada a unos 10 kilómetros de Torrejoncillo) de posibles movimientos de tropas en Portezuelo (pequeña localidad situada a unos 8 kilómetros con castillo medieval), aunque esto no sería posible sin otro pequeño torreón localizado en la finca de Monte Sordo dentro del término de Portaje, en un paraje denominado Cerro de la Torre (localidad situada a unos kilómetros de Torrejoncillo), aunque en la actualidad no quedan restos del mismo.
A día de hoy, como hemos podido comprobar el estado de conservación de esta construcción es bastante malo, cierto es, que si su estado fuera mejor, se podría explotar turistícamente hablando, ya que se encuentra situado en una zona con unas vistas inmejorables, donde se puede disfrutar de una paz y un ambiente natural típico de lo que denominamos Dehesa Extremeña, siendo único e inigualable. Además, cuenta con unos accesos totalmente practicables y bien comunicados, mediante una carretera de acceso hasta las instalaciones del Recinto Ferial de la Dehesa Boyal, y desde aquí hay un camino señalizado por el que se puede acceder fácilmente con cualquier tipo de vehículo o simplemente caminando.
Además, con la reciente construcción de la vía rápida que da acceso a la autovía (A-66), nos facilitaría una nueva vía y la posibilidad de dar a conocer tanto el Recinto Ferial de la Dehesa Boyal, como el Torreón a los usuarios de la nueva vía.
Al encontrarse dentro de los terrenos de la Dehesa Boyal, la explotación directa sería del propio Ayuntamiento, dependiendo del mismo la utilización y el mantenimiento.
Se podrían realizar visitas guiadas, así como rutas de senderismo, a caballo o en bicicleta, ya que el terreno lo permite, y está acondicionado para practicar los tres tipos de rutas, aprovechando el hábitat natural típico de una dehesa (encinas, alcornoques y pastizales), pudiendo visitar eras, pozos antiguos, lagunas, pedreras de pizarra, el Torreón, la casa del vaquero y observando las numerosas especies de pájaros menores que residen en la zona, así como disfrutar del tiro al plato o de un día de caza.
Está localizado a 377 metros de altura y en unas coordenadas geográficas de 39º 54´3.76´´ Latitud Norte y 6º29´45´33´´ Latitud Oeste, dentro de lo que denominamos Dehesa Boyal de Torrejoncillo, terrenos que aún en la actualidad, pertenecen al Ayuntamiento de Torrejoncillo, aunque la explotación de la misma no depende de él, sino de una asociación ganadera local.
El estado de conservación es deplorable, ya que apenas se mantiene en pie una de las paredes, que formarían dicha construcción, el resto, suponemos que se ha ido derrumbando con el paso del tiempo, o simplemente, una vez acabaron las guerras en la zona, y, por tanto, también la utilidad de este tipo de construcciones. La gente de la época fue utilizando las piedras de las paredes para construir sus propias casas o chozas. La cronología de dicho Torreón es todo un enigma, ya que no encontramos nada del mismo, recogido en ningún libro, con lo que datarlo es casi una incógnita. Suponemos, por el tipo de construcción, que se debió construir en época medieval-romana, por el tipo de material (granito) que se utilizó para la cimentación de la base del mismo.
Los materiales que se han utilizado para la construcción del mismo, se reduce a trozos de pizarras, argamasa y, bloques graníticos para sustentar las bases del mismo. Podemos afirmar, que la pizarra era extraída de alguna de las numerosas pedreras localizadas en los alrededores de la zona del Torreón; y los bloques graníticos suponemos serían transportados de localidades cercanas, ya que por la zona no era habitual este tipo de material.
Es una construcción de al menos de dos plantas, con una altura aproximada de 4 metros. A día de hoy, solo se mantiene en pie una de las paredes que formarían parte del Torreón y en la que se puede observar claramente la altura de lo que sería la primera planta, así como los cuatro palos o anclajes para colocar las vigas del segundo piso.
El Torreón, es una pequeña edificación de base cuadrada, con las esquinas reforzadas de granito, y las paredes de pizarras, con un grosor de 1,20 metros.
En el medio del Torreón podemos observar un pequeño aljibe o depósito, con unas medidas interiores aproximadas, de 1,50 x 1,50 metros y unas medidas exteriores de 2,15 x 2,10 metros, cuya utilidad no sería otra que depositar agua.
Está construido en un sitio estratégico, ya que su principal función o utilidad era avisar a Coria, (ciudad medieval situada a unos 10 kilómetros de Torrejoncillo) de posibles movimientos de tropas en Portezuelo (pequeña localidad situada a unos 8 kilómetros con castillo medieval), aunque esto no sería posible sin otro pequeño torreón localizado en la finca de Monte Sordo dentro del término de Portaje, en un paraje denominado Cerro de la Torre (localidad situada a unos kilómetros de Torrejoncillo), aunque en la actualidad no quedan restos del mismo.
A día de hoy, como hemos podido comprobar el estado de conservación de esta construcción es bastante malo, cierto es, que si su estado fuera mejor, se podría explotar turistícamente hablando, ya que se encuentra situado en una zona con unas vistas inmejorables, donde se puede disfrutar de una paz y un ambiente natural típico de lo que denominamos Dehesa Extremeña, siendo único e inigualable. Además, cuenta con unos accesos totalmente practicables y bien comunicados, mediante una carretera de acceso hasta las instalaciones del Recinto Ferial de la Dehesa Boyal, y desde aquí hay un camino señalizado por el que se puede acceder fácilmente con cualquier tipo de vehículo o simplemente caminando.
Además, con la reciente construcción de la vía rápida que da acceso a la autovía (A-66), nos facilitaría una nueva vía y la posibilidad de dar a conocer tanto el Recinto Ferial de la Dehesa Boyal, como el Torreón a los usuarios de la nueva vía.
Al encontrarse dentro de los terrenos de la Dehesa Boyal, la explotación directa sería del propio Ayuntamiento, dependiendo del mismo la utilización y el mantenimiento.
Se podrían realizar visitas guiadas, así como rutas de senderismo, a caballo o en bicicleta, ya que el terreno lo permite, y está acondicionado para practicar los tres tipos de rutas, aprovechando el hábitat natural típico de una dehesa (encinas, alcornoques y pastizales), pudiendo visitar eras, pozos antiguos, lagunas, pedreras de pizarra, el Torreón, la casa del vaquero y observando las numerosas especies de pájaros menores que residen en la zona, así como disfrutar del tiro al plato o de un día de caza.
Silvia Rodrigo Moreno
VINELUDAPEJUMI
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